Mitos de los Parabenos

Por Karen Franklin, MISSHA Skin Expert

Hoy en día es más frecuente escuchar el uso de parabenos en productos cosméticos, de aseo personal y cuidado de la piel o del cabello como algo dañino. Y por si fuera poco la estrategia de Marketing que se hace alrededor de estos preservativos, es más que eficiente, dándole al consumidor lo que pide, pero con el trasfondo de que el mismo no sepa qué es exactamente o por qué las fórmulas lo incluyen, sino porque es necesariamente “malo” o porque su fama lo precede.

En esta ocasión les hablaremos de los parabenos desde una perspectiva que pocos abordan y que ayudará a entender más acerca de su naturaleza y función con una mirada más científica, crítica y con fundamento. Así podrás decidir como un consumidor informado y podrás elegir lo que más te convenga.

Ahora bien, ¿Qué son los parabenos?

Es un grupo de químicos que preservan los productos cosméticos por meses y hasta años. Han sido utilizados desde 1920 y se elaboran a partir del ácido p-hidroxibenzoico que se pueden encontrar en moras y frambuesas. Los preservativos se pueden usar en los cosméticos para prevenir el crecimiento de bacterias nocivas y moho para alargar la vida útil de un producto, además tienen propiedades fungicidas y antimicrobianas.

Los parabenos más comunes son: metilparabeno, propilparabeno, butilparabeno y metilparabeno.

Entonces, ¿cuáles son los mitos más extendidos sobre estos preservativos?

Mito: Los parabenos son peligrosos y causan cáncer de mama.

Hecho: Los parabenos son extremadamente seguros, efectivos y están aprobados por la FDA.

El autor del artículo publicado en 2004 en J. Applied Toxicology, P. Abre, mencionó en su informe que los parabenos eran estrogénicos. Este breve informe nunca buscó ver si los parabenos también estaban presentes en el tejido normal, ni tampoco presentó ningún dato de que los parabenos causaran cáncer. Pero solo la afirmación de que los parabenos son débilmente estrogénicos, llevó a la creación de un blog en Internet que afirmaba erróneamente que los parabenos causan cáncer de mama porque son estrogénicos. Esta información errónea fue leída y replicada por muchas personas que copiaron la historia para sus propios blogs. Cuantos más blogs aparecían y repetían este informe, más “real” se volvía la historia. El hecho es que no hay absolutamente ninguna evidencia de que los parabenos causen problemas, incluido el cáncer de mama.

La CIR o Revisión de los Ingredientes Cosméticos se dio a la tarea de checar la seguridad del metilparabeno, propilparabeno y butilparabeno en 1984 y concluyó que todos estos parabenos eran seguros para su uso en productos cosméticos en niveles de hasta el 25%. Normalmente, los parabenos se utilizan en niveles que oscilan entre el 0,01 y el 0,3%. El 14 de noviembre de 2003, el CIR inició el proceso para reabrir las evaluaciones de seguridad del metilparabeno, metilparabeno, propilparabeno y butilparabeno con el fin de ofrecer a las partes interesadas la oportunidad de presentar nuevos datos para su consideración. En septiembre de 2005, el CIR decidió reabrir la evaluación de seguridad de los parabenos para solicitar estimaciones de exposición y una evaluación de riesgos para usos cosméticos. En diciembre de 2005, después de considerar los márgenes de seguridad para la exposición de mujeres y bebés, el Panel determinó que no era necesario cambiar su conclusión original de que los parabenos son seguros como se usan en cosméticos.

Otro mito: Los parabenos son estrogénicos y peligrosos.

Realidad: Los parabenos son seguros y tienen muy poca actividad estrogénica.

De hecho, el butilparabeno, el más "estrogénica" de los parabenos, tiene sólo alrededor de 1 / 100.000 de la actividad del propio estrógeno del cuerpo. En contraste, se ha demostrado que la actividad estrogénica del fitoestrógeno, la genisteína, que se encuentra en las semillas de soya, leche de soya, tofu y el edamame, tiene 1/50 de la actividad del estrógeno y puede imitar la acción del estrógeno. Dado que los parabenos son solo 1 / 100,000 tan potentes como los estrógenos, al hacer los cálculos resulta la genisteína, es 100,000 / 50 = 2000 veces más potente que los parabenos. Y, dado que se ingiere soya, mientras que no se ingieren parabenos, cualquier riesgo de compuestos "estrogénicos" es probablemente más de 2000 veces mayor cuando se ingiere un producto de soya.

¿Deberías evadir los parabenos?

En una palabra, no. A pesar del frenesí mediático que rodea a los parabenos, la investigación publicada y las organizaciones reguladoras cosméticas mundiales están aclarando esa respuesta: los parabenos, especialmente en las pequeñas cantidades utilizadas en productos de cuidado personal, no representan un riesgo significativo para la salud. Es más, deberíamos de preocuparnos por otros preservativos sintéticos o, por ejemplo, alimentos procesados que pueden afectar de manera importante a nuestro organismo al ser consumidos en mayores cantidades.